De la teor铆a a la pr谩ctica: los retos actuales de la aplicaci贸n normativa en materia de sostenibilidad
Diciembre de 2023Desde hace casi cinco a帽os, las novedades normativas en materia de sostenibilidad han sido una constante en el sector financiero.
En marzo de 2021 entraba en vigor el Reglamento de Divulgaci贸n [1](tambi茅n conocido como SFDR, por sus siglas en ingl茅s). Esta normativa introduc铆a tres grandes hitos en la industria de gesti贸n de activos y el sector de servicios de inversi贸n. En primer lugar, se obligaba a las entidades a divulgar sobre la integraci贸n de los criterios ASG (ambientales, sociales y de gobernanza) en el proceso de an谩lisis y toma de decisiones de inversi贸n. Una obligatoriedad de transparencia, que en la mayor铆a de los casos se asumi贸 como una obligaci贸n de aplicaci贸n. Este hecho exig铆a a las entidades empezar a utilizar nuevas fuentes de informaci贸n extra financiera, formar a los equipos en capacidades de sostenibilidad, modificar los procesos de inversi贸n, y, en consecuencia, ajustar los modelos de gesti贸n. En segundo lugar, se introduc铆a una suerte de "clasificaci贸n" de producto sostenible que defin铆a las obligaciones de transparencia a las que deb铆an someterse aquellos productos financieros que se clasificaran como sostenibles, bajo una de las dos categor铆as propuestas: "Promoci贸n de caracter铆sticas sostenibles (Art.8)" o "Inversiones con objetivo sostenible (Art.9). Por 煤ltimo, este reglamento incorporaba un factor adicional: las Principales Incidencias Adversas. Esto es, la gesti贸n y medici贸n del potencial impacto negativo que las inversiones realizadas pudieran causar sobre el medioambiente o la sociedad.
Tras la entrada en vigor de SFDR, parec铆a que "lo peor hab铆a pasado". Sin embargo, en agosto de 2022 tuvo lugar otro hito normativo de gran relevancia para la industria: la modificaci贸n de MiFID II e IDD por la que se incorporaban las preferencias de sostenibilidad en la evaluaci贸n de idoneidad de los clientes. Esta modificaci贸n normativa obligaba a las entidades que prestasen servicios de inversi贸n a preguntar a sus clientes de manera espec铆fica si deseaban incorporar preferencias de sostenibilidad en sus carteras. Ante una respuesta afirmativa: las entidades deb铆an estar en capacidad de ofrecer a sus clientes una propuesta de inversi贸n alineada con dichas preferencias, es decir, que incorporase una proporci贸n m铆nima de (a) inversiones sostenibles conforme a la Taxonom铆a europea [2], o (b) inversiones sostenibles conforme a SFDR o, alternativamente, que (c) considerase las principales incidencias adversas. Esto no s贸lo tuvo un impacto sobre las entidades que distribu铆an productos o prestaban dichos servicios de inversi贸n, sino que tambi茅n afectaba en la definici贸n de la gama de estrategias de inversi贸n de las f谩bricas de producto.
Estos hitos no han sido los 煤nicos que han acontecido en los 煤ltimos a帽os, pero sirven para ilustrar la magnitud de los cambios que ha tenido que asumir la industria financiera en un periodo de tiempo muy reducido. La falta de familiaridad con los nuevos requerimientos, unido a la constante evoluci贸n de un mercado todav铆a en desarrollo, han provocado que muchas entidades tuvieran que primar la implementaci贸n de una estrategia sencilla que les permitiese llegar en tiempo y forma, frente al desarrollo y aplicaci贸n de un modelo m谩s complejo y sofisticado, probablemente incompatible con el exigente calendario.
Sin embargo, las entidades tambi茅n deb铆an asumir que la implementaci贸n de la sostenibilidad en los modelos de gesti贸n y prestaci贸n de servicios de inversi贸n no se articulaba como un sprint normativo, sino como una carrera de fondo . Una carrera en la que se debe ir sorteando (o, mejor dicho, solucionando) los distintos retos que el propio desarrollo del mercado y de la regulaci贸n imponen.
Por tanto, 驴cu谩les ser铆an los pr贸ximos pasos que deber铆a seguir una entidad para evolucionar su estrategia de sostenibilidad?
En primer lugar, reconsiderar si cuenta con las herrmientas y recursos necesarios para integrar la sostenibilidad de manera transversal. Esto implica contar con fuentes de informaci贸n ASG suficientes y de calidad que vayan m谩s all谩 de los ya tradicionales rating ESG, contar con recursos internos debidamente formados en la materia, o contar con unos sistemas tecnol贸gicos suficientemente flexibles y robustos para integrar toda esta nueva informaci贸n.
En segundo lugar, evolucionar los modelos de gesti贸n de riesgos ASG: debemos pasar de un ejercicio de transparencia a un ejercicio de gesti贸n activa de los riesgos de sostenibilidad. Los modelos financieros de valoraci贸n deben incorporar estas variables de manera consistente para poder cumplir con el deber fiduciario de optimizar el binomio rentabilidad-riesgo hacia los clientes.
En tercer lugar, evaluar la conveniencia y el posicionamiento competitivo de la gama de producto. Por varios motivos: por un lado, para poder atender la mayor demanda de unos inversores cada vez m谩s sofisticados, as铆 como las mayores exigencias normativas y, por otro lado, para optimizar la b煤squeda de oportunidades de inversi贸n en nuevos segmentos del mercado.
Por 煤ltimo, y no menos importante, las entidades deben mantener un seguimiento regulatorio constante. Pese a que no se esperan grandes novedades sobre el lanzamiento de nuevos reglamentos, ser铆a muy simplista asumir que las modificaciones de los textos actuales, las aclaraciones por parte de los reguladores, las consultas p煤blicas o la aprobaci贸n de nuevas normas t茅cnicas que desarrollen los diferentes reglamentos vigentes, no se vayan a seguir sucediendo en los pr贸ximos a帽os. Y es que es l贸gico pensar que la normativa contin煤e mutando y progresando al mismo ritmo que lo hace el propio mercado y las din谩micas que lo conducen.
[1] Reglamento (UE) 2019/2088 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de noviembre de 2019 sobre divulgaci贸n de informaci贸n relativa a la sostenibilidad en el sector de los servicios financieros.
[2] Reglamento (UE) 2020/852 del parlamento europeo y del consejo de 18 de junio de 2020 relativo al establecimiento de un marco para facilitar las inversiones sostenibles.