La paradoja de la globalizaci贸n
Julio de 2020
"La paradoja de la globalizaci贸n: democracia y el futuro de la econom铆a mundial", de Dani Rodrik

Si bien el libro elegido no es el 煤ltimo de su prol铆fica producci贸n, s铆 recoge de manera amplia y detallada la esencia de sus tesis y preocupaciones, que 茅l mismo expone en el arranque de esta obra: los efectos del boom del comercio internacional y de las pr谩cticas de outsourcing y deslocalizaci贸n en el agravamiento de las desigualdades a trav茅s de los mercados de trabajo y de la erosi贸n del pacto social en el seno de los pa铆ses.
Ya anunciaba en 2011, algo que ha reiterado recientemente en el actual contexto de la crisis sanitaria global provocada por la COVID-19, que 芦las crisis generalmente ocurren no porque sean impredecibles, sino porque no se predicen禄 , fruto de la miop铆a y sobre confianza que los economistas han transmitido en sus narrativas, descripciones, explicaciones y justificaciones te贸ricas, que recurrentemente han obviado o minimizado la relevancia y capacidad de distorsi贸n de los muchos 芦puntos ciegos禄 presentes en los modelos de la teor铆a econ贸mica. Rodrik ofrece una narrativa alternativa basada en dos ideas b谩sicas: (i) los mercados y los gobiernos son complementarios, no sustitutivos; y (ii) el capitalismo no se circunscribe a un 煤nico modelo, viene con diferentes sabores. E insiste en que, a diferencia de lo que predica el 芦mantra mainstream禄, ni los mercados son siempre eficientes, ni la innovaci贸n financiera traslada los riesgos a los agentes m谩s capaces de gestionarlos, ni la autorregulaci贸n es la soluci贸n, ni la intervenci贸n de los gobiernos es, por defecto, da帽ina e ineficaz. Se帽ala que la responsabilidad de los economistas existe en la medida en que son los 芦arquitectos del contexto intelectual en el que las pol铆ticas dom茅sticas e internacionales se dise帽an e implementan禄 y los encargados, asimismo, de interpretar los 茅xitos y fracasos.
Parte sustantiva de los problemas derivados de la globalizaci贸n subyace en la carencia de reglas de juego e instituciones pol铆ticas internacionales con la legitimidad de las existentes en los mercados nacionales, de modo que los mercados globales, en palabras de Rodrik, sufren de una gobernanza muy d茅bil y, por ende, se caracterizan por su tendencia a la inestabilidad, la ineficiencia y una pobre legitimidad popular. Este desequilibrio entre el alcance nacional de los gobiernos y la naturaleza global de los mercados constituyen el tal贸n de Aquiles de la globalizaci贸n, m谩xime cuando 茅sta se ha convertido en un fin en s铆 mismo, y no un medio para alcanzar mejores cotas de bienestar.
Ese Tal贸n de Aquiles de la globalizaci贸n queda modelizado por Rodrik en un 芦trilema禄 -situaci贸n en la que debemos elegir entre tres opciones, que son o aparentan ser contradictorias entre s铆, o conducen a resultados distintos- que hoy sigue m谩s vigente incluso que cuando lo expuso por primera vez hace casi una d茅cada. El que Rodrik nos presenta enfrenta tres conceptos: la globalizaci贸n econ贸mica, la democracia pol铆tica y la soberan铆a nacional. Acompa帽ados de una restricci贸n: no es posible conciliar la hiperglobalizaci贸n con democracia y soberan铆as nacionales, todo al mismo tiempo y con la m谩xima intensidad.
Rodrik plantea que podemos aspirar a tener hiperglobalizaci贸n y democracia pol铆tica a escala global, con reglas e instituciones para una nueva gobernanza, pero a costa de la soberan铆a nacional. O podemos aspirar a mantener nuestra plena soberan铆a y la democracia pol铆tica, pero sin integrarnos en el mundo. O podemos estar plenamente integrados en la l贸gica de la globalizaci贸n econ贸mica, manteniendo un alto nivel de control pol铆tico interno, pero sin democracia pol铆tica, o sea sin legitimidad social para tener capacidad de cuestionar, discutir y pactar las reglas que se deriven de los impactos y las consecuencias de esa integraci贸n econ贸mica a escala global.

Las opciones factibles son, por tanto, o limitar la democracia, o limitar la globalizaci贸n, o globalizar la democracia. Un ejemplo a nivel regional de la 煤ltima opci贸n lo representa la Uni贸n Europea, pero Rodrik anticipa que ese federalismo a nivel global no ser谩 posible, en el mejor de los casos, en el presente siglo. De hecho, hoy nos encontrar铆amos atrapados en una zona inc贸moda justo entre los tres nodos del trilema.
En definitiva, apunta que 芦las democracias tienen el derecho de proteger sus acuerdos sociales, y cuando este derecho se contrapone o enfrenta con los requisitos de la econom铆a global, son estos segundos los que deben dejar paso al primero禄. Para ello, ofrece siete principios 芦sensatos禄 para una nueva (y sana) globalizaci贸n sustentada en un capitalismo 3.0 inspirado en una actualizaci贸n, para el siglo XXI, del paradigma de Bretton Woods.