Tendencias en la gesti贸n de riesgos financieros
Noviembre de 2018 La presencia internacional de las empresas espa帽olas se ha visto fuertemente reforzada tras la crisis financiera. Dicha tendencia, muy atractiva para los inversores no residentes, ha supuesto una serie de retos para las compa帽铆as, en la medida en la que la complejidad de gesti贸n de los riesgos financieros y, en particular, los vinculados al riesgo de tipo de cambio, ha adquirido un fuerte protagonismo; en mayor medida, en un contexto en el que el entramado empresarial espa帽ol est谩 mayoritariamente conformado por pymes, cuyos recursos destinados a la gesti贸n de riesgos pueden no haber sido los 贸ptimos.Contextualizaci贸n
El incremento de la presencia internacional de la empresa espa帽ola ha sido la t贸nica habitual registrada en el mercado tras la crisis financiera. La gesti贸n de los riesgos se ha visto influida por esta din谩mica, particularmente manifiesta en el riesgo de tipo de cambio. Y es que las compa帽铆as se han visto abocadas a operar y gestionar en un mundo cada vez m谩s diversificado geogr谩ficamente, entrando en acci贸n monedas d茅biles y, en muchos casos, extremamente vol谩tiles, que han impactado de forma relevante en los estados financieros de las empresas.
A continuaci贸n, analizaremos en detalle la gesti贸n del riesgo de tipo de cambio, en la medida en la que, m谩s all谩 de por la importancia creciente de la internacionalizaci贸n, es uno de los riesgos que entra帽an mayor complejidad de gesti贸n en el marco de una empresa, debido a sus diferentes modalidades de aparici贸n, as铆 como a los distintos impactos que genera en el balance, en la cuenta de resultados y en el efectivo.
Enfoque de gesti贸n y jerarqu铆a de riesgos
La gesti贸n del riesgo de tipo de cambio puede ser est谩tica o din谩mica, siendo recomendable, en todo caso, la definici贸n de un horizonte temporal a gestionar, as铆 como el establecimiento de subper铆odos de seguimiento que permitan ajustar las decisiones tomadas.
Adicionalmente, la gesti贸n de riesgos debe tomar en consideraci贸n qu茅 riesgos se han de cubrir, as铆 como su orden de prioridad. Los riesgos financieros que han de tener un car谩cter prioritario en la toma de decisiones de cobertura son aquellos que generan impactos contables que tienen un reflejo inmediato en el efectivo de la compa帽铆a. Se trata de aquellos riesgos asociados a los flujos de caja en moneda extranjera, y comprenden flujos comerciales y flujos financieros (servicio de la deuda). Dichos riesgos pueden suponer una mayor o menor tesorer铆a en funci贸n de la evoluci贸n de los tipos de cambio. Son, por tanto, susceptibles de afectar a la cuenta de resultados.
En segundo lugar, la prioridad de gesti贸n deber铆a recaer en aquellos riesgos financieros que generan impactos contables, pero que no afectan al efectivo de la empresa de forma inmediata. Son los riesgos vinculados a: i) la conversi贸n de estados financieros de filiales denominados en moneda extranjera, cuyo impacto se genera en el patrimonio neto consolidado, y ii) la conversi贸n de activos y pasivos monetarios en moneda extranjera a moneda funcional a cierre de ejercicio (impacto en cuenta de resultados). Por 煤ltimo, se gestionar谩n los riesgos financieros que no generan impactos contables y tampoco afectan de manera directa al efectivo de la compa帽铆a. Se trata de riesgos de car谩cter econ贸mico, que no afloran de manera expl铆cita en los estados financieros, pero que s铆 que se reflejan de forma indirecta o en el valor futuro.
Medidas de gesti贸n propuestas
En funci贸n de la naturaleza del riesgo, la manera de abordar su gesti贸n ser谩 radicalmente diferente.
Riesgos que generan impacto en el efectivo. La gesti贸n se circunscribir谩, en primer lugar, al neteo de exposiciones intragrupo (aplicable a sociedades que conformen un grupo) y, en segundo lugar, a la cobertura de la exposici贸n neta mediante la aplicaci贸n de derivados. En concreto, el derivado cuyo uso es m谩s frecuente en los programas de coberturas de tipo de cambio es el forward.
La virtualidad de la implementaci贸n de coberturas mediante derivados en los riesgos que generan un impacto en el efectivo estriba en que se trata de una corriente cierta, que ocurre en una fecha espec铆fica, y cuya volatilidad incorpora un riesgo innecesario a la cuenta de resultados y a la tesorer铆a. En este punto, resulta conveniente indicar que el horizonte de cobertura debe tomar en consideraci贸n el coste de protecci贸n, pues cuanto m谩s largo sea el plazo, mayor es el coste (impl铆cito o expl铆cito) de los instrumentos de cobertura contratados.
Para la implementaci贸n de las coberturas se recomienda la utilizaci贸n del Value at Risk (VaR) a un nivel de confianza del 95% como medida del riesgo de divisa. La interpretaci贸n de este umbral es la m谩xima p茅rdida que, en el 95% de los casos, experimentar谩 la empresa como consecuencia de la evoluci贸n del riesgo de tipo de cambio. Una vez calculada la p茅rdida m谩xima que potencialmente pudiera tener la compa帽铆a, se recomienda, como medida complementaria, establecer un l铆mite de p茅rdidas por riesgo de cambio (stop losses), a partir del cual se activen medidas de an谩lisis de la nueva situaci贸n, implementaci贸n de coberturas, reasignaci贸n de l铆mites, etc., de forma que se mitigue la m谩xima p茅rdida prevista.
Riesgos contables. La gesti贸n de los riesgos contables girar谩 en torno al aprovechamiento de las posibilidades que da la normativa contable, principalmente, mediante coberturas naturales. El recurso a derivados en este tipo de riesgos no es recomendable, dadas las posibilidades de incurrir en un riesgo de ruptura de la caja asociado a la liquidaci贸n de los instrumentos derivados en los que la compa帽铆a ha obtenido una p茅rdida, cuando el riesgo que se quer铆a proteger era meramente contable. Deber铆a considerarse, asimismo, el impacto que puede tener la contabilidad de coberturas en el reconocimiento de los instrumentos de cobertura contratados.
Un ejemplo de cobertura contable a aplicar en riesgos contables es recurrir a las posibilidades de designar la financiaci贸n de activos inmovilizados como parte de la inversi贸n en el extranjero. De esta manera, la reclasificaci贸n en el patrimonio neto consolidado de las diferencias de cambio, en lugar de en la cuenta de resultados, permitir铆a mitigar la penalizaci贸n en el beneficio del ejercicio en curso.