La cara y la cruz de la econom铆a de los datos
Mayo de 2018
Nos encontramos al borde de la denominada Cuarta Revoluci贸n Industrial que, como las anteriores, est谩 llamada a transformar buena parte, si no todos, de los 谩mbitos de nuestra existencia: c贸mo producimos, c贸mo consumimos, c贸mo nos relacionamos y comunicamos, en definitiva, c贸mo evolucionamos como sociedad.
La Primera Revoluci贸n Industrial estuvo sustentada en innovaciones tecnol贸gicas como la m谩quina de vapor; la Segunda tuvo a la electricidad y el petr贸leo como detonantes; la Tercera eclosion贸 gracias al desarrollo de las tecnolog铆as de la informaci贸n y la comunicaci贸n (TIC) que permitieron consolidar el proceso de globalizaci贸n hoy irreversible. La actual (Cuarta) est谩 sustentada en un elemento aparentemente m谩s et茅reo pero omnipresente: los datos.
Los datos generados por ciudadanos, empresas, administraciones p煤blicas y objetos conectados (Internet de las Cosas, IoT por sus siglas en ingl茅s) han aumentado exponencialmente en los 煤ltimos a帽os, y la tendencia es imparable, a la espera del despliegue del 5G. De este crecimiento exponencial del volumen, la variedad y velocidad de generaci贸n de datos -de ah铆 el t茅rmino Big Data-, y de las mayores capacidades para su captura, almacenamiento, procesamiento y an谩lisis aplicando m茅todos de la ciencia de datos o Data Science. De la aplicaci贸n de dicha disciplina que engloba m茅todos computacionales, matem谩ticos y estad铆sticos que permiten responder preguntas aplicando el m茅todo cient铆fico -describiendo, anticipando, prediciendo sucesos y prescribiendo acciones-, surge la denominada Econom铆a de los Datos.
Las preguntas que podemos responder hoy con tal cantidad de datos contribuyen a mejorar sustancialmente el conocimiento de los perfiles de clientes y usuarios de servicios de todo tipo (p煤blicos o privados) para mejorar a su vez la calidad, idoneidad y/o personalizaci贸n de dichos servicios; reducir costes mediante la detecci贸n y soluci贸n de ineficiencias; reducir riesgos (p.e. de desabastecimiento, sobrecarga, sobredemanda, sobreoferta, etc.); crear nuevos productos, servicios e incluso modelos de negocio, entre otras.
El desarrollo de otros avances tecnol贸gicos tales como la Internet 2.0 (redes sociales) y sucesivas, o el sistema Cloud (centros de almacenamiento y procesamiento remotos de datos) han reducido las barreras de entrada de empresas y administraciones p煤blicas a la inversi贸n y uso de herramientas digitales para optimizar y proteger los datos, germen de la informaci贸n y el conocimiento.
Necesidad de una regulaci贸n equilibrada
La regulaci贸n es la salvaguarda de la privacidad de informaci贸n sensible. La recopilaci贸n y almacenamiento de datos personales por parte de entidades p煤blicas y privadas demand贸 en su momento una serie de reglas de juego para tratar esta informaci贸n ante la exposici贸n masiva de datos por parte de las TIC, especialmente Internet. Con el inminente desarrollo del IoT sustentado en la captura y env铆o aut贸nomos de datos por parte de objetos cotidianos conectados a Internet, adem谩s de implicaciones en materia de seguridad, tambi茅n desvela nuevas preocupaciones en materia de privacidad y protecci贸n de datos, en este caso no necesariamente de car谩cter personal.
En t茅rminos geopol铆ticos, es interesante destacar que Europa es la regi贸n del mundo en que la protecci贸n de datos ha alcanzado un nivel m谩s elevado, mientras que en Norte Am茅rica la privacidad constituye el elemento central. Los principios y derechos b谩sicos paneuropeos contemplados en el est谩ndar internacional quedan recogidos en el Reglamento General de Protecci贸n de Datos (RGPD) de la UE, del que se detalla en otra secci贸n de la presente edici贸n de Empresa Global.
Mercados y oportunidades: transici贸n de la econom铆a 芦brick and mortar禄 a la econom铆a de la informaci贸n
La gran masa de datos que hoy generamos, almacenamos y custodiamos supone un reto de capacidad para las empresas, facilitado, eso s铆, por sistemas como el Cloud Computing, que permite ajustar el grado de demanda dot谩ndolo de flexibilidad y eficiencia.
La efervescencia de los nuevos modelos de negocio -tanto locales como globales- que est谩n reconfigurando la estructura de muchos mercados y sectores productivos permite aumentar la eficiencia en la producci贸n y, sobre todo, en la distribuci贸n de bienes y servicios, ya sean estos tradicionales o nuevos.
La innovaci贸n y la transparencia son atributos que de forma intensiva est谩n desdibujando las barreras de entrada en ciertos mercados que se basaban en la informaci贸n, fomentando una reorganizaci贸n de los negocios tradicionales al aparecer nuevas empresas que impulsan una mayor competencia en el mercado. Un elemento b谩sico y diferencial en el que se apoyan estas nuevas empresas intensivas en el uso de datos es la transparencia, por medio de la mayor disciplina introducida entre los operadores tradicionales. Estos sistemas corrigen o alinean a trav茅s de la reputaci贸n los incentivos de la oferta y la demanda y permiten una asignaci贸n m谩s eficientemente de los recursos por parte de ambas partes del mercado.
Desde un punto de vista econ贸mico, las plataformas digitales act煤an como intermediarios entre oferentes y demandantes, y ya han transformado un amplio abanico de industrias en el escenario tradicional (las pioneras, aquellas relacionadas con contenidos educativos, informativos y culturales, transporte, alojamiento o compra-venta de bienes y servicios minoristas) y seguir谩n haci茅ndolo en otros sectores. Se benefician de econom铆as de escala por los elevados costes fijos; tambi茅n de econom铆as de red, cuya existencia no deja de constituir un importante desaf铆o para la regulaci贸n en cuanto habilita a las plataformas a erigir nuevas barreras de entrada a medida que las redes se multiplican bajo la misma plataforma. Esto significa que la utilidad de los consumidores en un lado del mercado aumenta, conforme lo hace el n煤mero de consumidores en el otro lado. Este efecto plantea implicaciones importantes, tanto para las estrategias de negocio como para las estructuras de los mercados con m煤ltiples lados.
Efectos sobre el empleo
Se ha abierto el debate del impacto que ejercer谩 sobre el empleo. En la medida en que las m谩quinas puedan reemplazar parte o la totalidad de algunas tareas desarrolladas actualmente por trabajadores, gracias al procesamiento de informaci贸n de manera instant谩nea (machine learning) o los nuevos avances en la producci贸n industrial (como la impresora 3D o el veh铆culo aut贸nomo), resulta inevitable pensar que buena parte de los puestos de trabajo que conocemos hoy desaparecer谩n o, cuanto menos, se convertir谩n. Sin embargo, la revoluci贸n digital y la econom铆a de los datos tambi茅n abren un importante y variado abanico de oportunidades laborales que es conveniente conocer y aprovechar.
La demanda de perfiles digitales no solo ha crecido de forma exponencial en los 煤ltimos a帽os, sino que est谩 llamada a ejercer un papel relevante en la nueva estructura del mercado de trabajo. Destacan tres figuras: el Director de Datos o Chief Data Officer (CDO); el Ingeniero de Datos o Big Data Engineer; y los directores de seguridad y protecci贸n de datos. Los rasgos a destacar de este tipo de perfiles laborales son la multidisciplinariedad (matem谩ticos, estad铆sticos, ingenieros, inform谩ticos y conocimientos en el 谩mbito de los negocios) y la capacidad de adaptarse a entornos cambiantes.
Multitud de retos presentes y futuros
Nos son pocos los retos que impone este nuevo paradigma. La residencia y almacenamiento de los datos es un factor clave para la soberan铆a y la construcci贸n de la econom铆a digital, por lo que los Gobiernos procuran adaptar la jurisdicci贸n para mejorar su control. La Estrategia Europea del Mercado 脷nico Digital tiene el prop贸sito de mejorar el acceso de los consumidores y empresas a los bienes y servicios digitales en toda Europa y a la creaci贸n de derechos para los productores de datos. Procura resolver el trade-off entre el derecho a la propiedad intelectual, la privacidad y la innovaci贸n.
En este contexto, la sociedad todav铆a no ha asimilado la infinidad de informaci贸n que produce y revela diariamente, muchas veces escapando a su control (por ejemplo, en el uso descuidado de las redes sociales). Esto provoca que la preocupaci贸n en torno a la privacidad de la informaci贸n sea creciente, por lo que una serie de mecanismos tales como t茅rminos y condiciones de uso, avisos de privacidad y la eliminaci贸n o anonimizaci贸n de contenidos se est谩n implementando recientemente. Dado que el mismo dato puede circular por la red durante un tiempo muy prolongado, el Reglamento General de Protecci贸n de Datos (RGPD) considera de m谩xima importancia el cumplimiento del derecho de informaci贸n que todo titular de los datos tiene que tener sobre el tratamiento, uso y destino que se vayan a aplicar a sus datos personales.
Un reto b谩sico son la seguridad y ciberdefensa, basadas en la prevenci贸n, en evitar p茅rdidas de datos y en la monitorizaci贸n de los canales de transici贸n mediante t茅cnicas de encriptaci贸n, tokenizacion y gesti贸n de claves para evitar el uso no autorizado y la corrupci贸n de datos.
Finalmente, abordamos un 煤ltimo reto, que tiene que ver con la siguiente pregunta: 驴Cu谩nto contribuye la Econom铆a de los datos a la econom铆a? Bueno... no existe en la actualidad un consenso definido en torno a la contribuci贸n de la econom铆a de los datos al crecimiento. El sistema tradicional de medici贸n a trav茅s del Producto Interior Bruto (PIB) se calcula a partir de las operaciones de compraventa llevadas a cabo en el mercado que llevan asociado un determinado precio, es decir, se basa en lo que se conoce como la econom铆a de mercado. Este enfoque convencional no necesariamente puede valer para estimar el volumen de negocio que es capaz de generar la Econom铆a de los datos.
Se abre, por tanto, un debate sobre la capacidad de las estad铆sticas y metodolog铆as empleadas hasta la fecha para captar, precisamente, las nuevas relaciones comerciales caracter铆sticas de la econom铆a digital, en general, y de los datos en particular. La Cuarta Revoluci贸n Industrial supone, sin duda alguna, un replanteamiento de la manera en la que las estad铆sticas recogen la realidad socio-econ贸mica que emerge con el desarrollo de la econom铆a de los datos, obligando a los Sistemas de Cuentas Nacionales a reinventarse.
Ver贸nica L贸pez Sabater es consultora del 谩rea de Econom铆a Aplicada de Afi.
